Fui muy amigo de José Antonio. En su recuerdo, permitidme que publique el texto que le ha dedicado su hijo en Facebook con motivo de este lamentable acontecimiento:
"A veces la vida se empeña en moldearte a golpe de cincel, de forma dura, seca, violenta, arrancándote con movimientos bruscos lo que ella quiere, a su antojo, sin conveniencia, y seguramente a destiempo, y ayer puedo decir que se llevó uno de los trozos más grandes de la mía.
Nos dejó una gran persona, alguien que vivía por y para los demás, que se desvivió hasta el último día por su mujer, por sus hijos y por sus amigos. Alguien que nunca tuvo una vida fácil pero que siempre ofreció una sonrisa, unas manos, y una cabeza prodigiosa para ayudar a quien lo necesitara.
Paradojas de la vida, persona de físico y mente aparentemente delicados que en sus últimos meses se tornó en titán, en un luchador que nos ha sorprendido día a día desafiando a su propio escultor, quien con un cruel movimiento decidió hace unos meses que había llegado el momento de quebrar su corazón.
Puedo decir, sin riesgo a equivocarme, que ha sido la persona más importante que he tenido al lado, y que como suele ocurrir me quedo con la sensación de habérselo dicho pocas veces. Que me ha demostrado muchas cosas en muy poco tiempo, y que siempre me quedaré con su sonrisa tranquilizadora y sus ansias por volver con nosotros a casa aun sabiendo que no era posible.
No voy a desearle que descanse, sino todo lo contrario. Ojalá siga donde sea ayudando a quien lo necesite, disfrutando con sus trenes, escribiendo sus novelas, protestando por todo, dando cariño, y sabiendo que no deja un hueco grande dentro de nosotros sino un espacio rebosante de amor, conocimientos y experiencias inolvidables.
Puedes estar tranquilo astronauta Markös, que haré todo lo que esté en mi mano por continuar con tu legado. Ha sido todo un honor y un privilegio haberte tenido al lado."