Y viendo esto me pregunto: ¿Cómo se debe de sentir aquella gente que subió en el Manresa-Guardiola de Berguedà, con todo el sabor ferroviario, paisajístico, humano... y ya no pueden volver a verlo? Realmente los Catalans son unos ferrocarriles, o lo fueron, geniales. El metro actual no les hace justicia, pero al menos siguen parcialmente intactos (véase la línea de Igualada). Y sí, era la leche, porque era una sensación, no era frío. Llamadme nostálgico o carroza, pero para mi es la verdad. Y se tuvo que quitar el viaducto además por la duplicación de vía de los FGC, y por la construcción del AVE, ya es mala suerte. Pero no morirá, porque como dijo Manrique, solo morirá mientras no se le recuerde. Y ya paro, a partir de ahora hablare del AVE,
a vé que los mandamases no me toquen "el crostó"
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Saludos, Ganz.
...Porque siempre hay un motivo para sonreír.
Saludos y salud a todos.